Recuperación de las Medallas Bomberiles de Emilio Dabancens
Tercerinos recuperando valioso patrimonio histórico
En un esfuerzo coordinado y dedicado, nuestra Heroica Tercera Compañía ha logrado recuperar las valiosas medallas del voluntario Emilio Dabancens, un héroe tanto en el servicio bomberil como en los campos de batalla de la Primera Guerra Mundial. Estas condecoraciones, símbolos de valentía y sacrificio, habían sido puestas a la venta, pero gracias a la intervención oportuna de varios miembros de la institución, ahora están de vuelta en su hogar legítimo.
Una Búsqueda Infructuosa y su Continuación
El 21 de julio de 2008, nuestro Guardián de Leyenda de la época, Voluntario Honorario Osvaldo Moncada Pino, informó al Voluntario Honorario Carlos Iturra Briones, presidente del Departamento de Historia de nuestra Compañía, sobre la existencia de medallas en Francia pertenecientes a Emilio Dabancens. Don Sergio Segeur Arias, entonces Director de la Cuarta Compañía Pompe France del CBS, proporcionó información sobre estas medallas, que estaban en poder de un numismático desconocido.
Hace poco encontré en los Alpes Marítimos, el rastro de un francés que fue miembro de la 3ª Compañía de Bomberos de Santiago a fines del siglo XIX. Al parecer, fue uno de los que participó en el conflicto de 1914/18, al menos hasta 1916.
Su nombre es Mile Dabancens.
Pude ponerme en contacto con el Sr. Dubois, quien tuvo la amabilidad de enviarme su correo electrónico, después de haberle contado sobre mi búsqueda.
Me dirijo, pues, a vosotros con la esperanza de que podáis responder a las preguntas que me hago y que me permitan reconstruir la historia de este hombre, que sin duda fue valiente y patriota.
¿Fue uno de los 22 franceses chilenos que fueron a luchar a Francia en 1914? ¿Es uno de los seis que no volvieron, lo que explicaría la presencia de estas medallas en Francia? ¿O regresó a su puesto en la 3ª compañía, solo para ser herido en el incendio, como parece sugerir la medalla de la municipalidad de Santiago que lleva su nombre (seguido de la letra D)? Entonces, ¿cómo llegaron estas medallas hasta aquí?
El conjunto incluye 17 medallas, incluida una conmovedora medalla de bautismo grabada con el nombre de Milie Dabancens fechada el 12/11/1907, una medalla militar y tres cruces de guerra con lienzos y palmas, una fechada en 1914/1915 y las otras dos en 1914/1916.
Les envío las fotos de algunas de las medallas que me han permitido reconstruir esta parte de su historia, y pronto les enviaré todas las demás.
Soy consciente de que es posible que no tenga la información que estoy buscando; en este caso, el CBS habrá encontrado el rastro perdido de uno de sus antiguos miembros, y estaré encantado de haber podido contribuir a ello.
A la espera de su respuesta, le envío mi más respetuoso saludo. »
PatrickEl correo de un investigador francés, fechado el 17 de julio de 2008, describía el hallazgo de 17 medallas, incluyendo una medalla de bautismo y varias cruces de guerra, que pertenecían a Dabancens. A pesar de los esfuerzos de Carlos Iturra, las medallas no pudieron ser recuperadas en ese momento, y se perdió el contacto con el descubridor.
El Hallazgo 10 Años Después
En enero de 2018, nuestro Voluntario Carlos Iturra Briones relató este suceso al Voluntario Claudio Valladares Herrera durante una conversación de camaradería, quien comprometido con la causa, utilizó sus conocimientos informáticos para rastrear las medallas en internet. Tras varias semanas de búsqueda, encontró información sobre el actual poseedor de las medallas en Francia. Con la confirmación de que al menos dos de las medallas aún existían, se dio aviso inmediato a la Oficialidad para iniciar el retorno de las preseas a nuestra Compañía.
El Ayudante de Secretaría General don Álvaro Velasco Jenschke se encargó de coordinar la compra y el traslado de las medallas, asegurando que el proceso se realizara de manera rápida y segura. Esta acción fue fundamental para evitar que estas piezas de valor inestimable cayeran en manos desconocidas.
Una de las medallas en venta, correspondía a una condecoración militar de un concurso internacional de tiro, realizado en la ciudad de Epinal-Francia donde Dabancens obtuvo el primer premio del 152° de línea. Desafortunadamente, dicha medalla ya había sido vendida a un tercero por lo cual no pudo ser recuperada.
Financiamiento y Resguardo
Nuestros Voluntarios Camilo Cea Wilhelm y Nicolás Inostroza Oyarzún tomaron la iniciativa de financiar la adquisición de las medallas. Gracias a su generosidad y compromiso con la historia de la institución, las condecoraciones pudieron ser rescatadas y puestas bajo resguardo.
Adicionalmente, estos Voluntarios financiaron una restauración digital de una vieja fotografía del Voluntario Dabancens en su tenida militar para acompañar las medallas rescatadas.
Emilio Dabancens: Un Héroe Recordado
Emilio Dabancens es un nombre que resuena con orgullo en la historia del Cuerpo de Bomberos de Santiago. Nacido chileno pero de ascendencia francesa, Dabancens partió a Francia en 1914 para defender la patria de sus ancestros durante la Primera Guerra Mundial. En una emotiva carta dirigida al Director de la Compañía el 9 de septiembre de 1914, Dabancens expresó su deseo de regresar algún día y pidió permiso para ausentarse, asegurando que siempre llevaría con honor el número tres de su compañía.
El Regreso Triunfal
El 27 de agosto de 1917, Emilio Dabancens regresó de la guerra. Su llegada fue recibida con entusiasmo en la Estación Mapocho por miembros de su compañía y la Séptima Compañía, quienes, en un gesto de compañerismo, lo acompañaron con todo su material. Dabancens fue homenajeado por sus compañeros, entregando a su querida institución las dos más altas condecoraciones otorgadas por el gobierno francés: la «Cruz de Hierro» con tres citaciones en la orden del día y la «Cruz al Mérito Militar».
Un Legado Preservado
Estas medallas, ahora recuperadas, son testimonio de la abnegación y el coraje de Emilio Dabancens. Su historia y su sacrificio permanecen como un ejemplo inspirador para todos los bomberos. Gracias al esfuerzo los Tercerinos: Osvaldo Moncada Pino, Carlos Iturra Briones, Claudio Valladares Herrera, Álvaro Velasco Jenschke, Camilo Cea Wilhelm y Nicolás Inostroza Oyarzún, la memoria de Dabancens seguirá viva en el corazón de la institución, inspirando a futuras generaciones de bomberos.
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